martes, 15 de diciembre de 2009

Recortadores varios (2)

El domingo por la mañana, con un frío de nevada en ciernes, me fui a Daimiel, a la penúltima carrera popular de la temporada, pues la última será la del Pavo en el buen sitio del Parque de Gasset.
Desde que fui a los 101 me he alejado del asfalto, me he dado cuenta que prefiero correr por el monte antes que machacarme buscando bajar unos segundos la marca en tal o cual distancia. Creo que, quitando los que compiten por la victoria, los populares corremos por el curioso y quizá instintivo efecto liberador que tiene el hecho de correr y el deporte en general. En todo caso corremos por el afán de superar nuestra marca, y no la del vecino. Al menos eso creo.
Será que me estoy asilvestrando, y ya corro hasta sin cronómetro. Mezclar correr con cierta dosis de aventura es para mí algo necesario, lo demás es rutina, como levantar pesas o hacer una demanda de conciliación, y para eso no cojo el coche en un día de fiesta.
Las distancias de asfalto, una vez visto tu nivel, se reducen a una cuestión de marca, salvo por el hecho de disfrutar de pueblos y ciudades cortados al tráfico donde el correr es el protagonista. Si me apuras tiene un carácter hasta reivindicativo, por eso no entiendo las conductas de algunos corredores como diré más abajo.
Así, sin cronómetro, me fui a Daimiel, y a pesar del frío mucha gente en la salida. Entre ellos estaban los "recortadores" de siempre, gente de todos los niveles (que ni mucho menos pelean por la victoria) que recortan en cualquier esquina por las aceras o por el barbecho, engañándose a sí mismos, para bajar como mucho 10 o 15 segundos su marca. Absurdo. ¿Para eso pasan frío? ¿Para correr menos de diez kilómetros y luego chulear al vecino? ¿Para colarse también en la llegada a coger la camiseta de regalo y el aquarius? Cara duras hay en todos lados, pero menos en el campo que en el asfalto.
Está claro que no todos tenemos la misma vocación para calzarnos las zapatillas. A mí correr sin cronómetro me viene bien, incluso para ir más rápido, pues no se pierde tiempo mirando la muñeca, sin agobios de ahora voy lento o ahora más rápido.
Para no haber hecho entrenamiento espefícico alguno me salió la meritoria marca de 40' 26''. Me da igual la posición, cosa que parece no suceder con los recortadores aunque, todo sea dicho, muchos lleguen detrás de mí.
También merecen una mención especial todos aquellos, primos hermanos de los recortadores (quizá sean los mismos...) que en la salida se colocan sin tener en cuenta su nivel, no sé si para salir más guapos en la foto o para qué cojones, y provocan atascos, empujones y peligrosos adelantamientos en el primer kilómetro. Que les den. Al parecer en las carreras populares también hay "menotistas" y "bilardistas".

Recortadores varios (1)

Consultas independentistas se llamarán porque consultan su opinión sólo a los independentistas. Qué cosa más interesada. Es cómo ir al Campo Nuevo o al Bernabéu a preguntar al público de qué equipo son. Hay cosas absurdas y otras inútiles, estas consultas son las dos cosas a la vez.
Nos dice PUIGCERCÓS que 'nadie debe temer a las papeletas y a las urnas y, como digo siempre, en Cataluña se ha hecho siempre democráticamente', y se equivoca no sé si por estupidez o interés político.
En toda democracia, efectivamente, hay votaciones, pero no toda votación es democrática. Los masones también votan, y algunas instituciones religiosas, e incluso los partidos políticos tienen sus congresos internos y se dedican a votar.
La democracia es muchas más cosas que el Sr. PUIGCERCÓS, por estupidez o interés, ignora. Es respeto al Estado de Derecho, al principio de legalidad, a la Constitución en que se funda esa misma democracia. Las consultas independentistas no cumplen ninguno de esos elementos.
Creo que el problema de fondo de los independentitas catalanes es que no quedaron satisfechos con las últimas votaciones, legales y democráticas, realizadas en Cataluña. Por ello intentan hacer mascaradas absurdas e inútiles; intentan buscar legitimidad supuestamente democrática saltándose todas las leyes a la torera.
Estos de la esquerra y de la independencia hipócrita quieren abolir las corridas de toros en Cataluña. No me extraña, con políticos tan recortadores y toreros, que usan la lengua por muleta y sus huevos por montera, no les hace falta ver a José Tomás ni a Morante de la Puebla.
P.D.: Que conste que aborrezco las corridas de toros.