El otro día escuché en la radio, por voz de un tertualiano de cuyo nombre no puedo acordarme, que el problema de la burguesía española es que ha leído poco o nada, que le ha gustado más el campo, la caza, las mozas y el buen yantar. Quizá tenga razón.
En Reino Unido tienen los clubs de caballeros, de carácter distinguido, exclusivo y excluyente pero con cierta vocación intelectual. Restirados y ensimismados, pero su estética tiene más cimientos que la cartera, y crean sociedades culturales y tienen libros y esas cosas. Incluso leen los periódicos sin necesidad de entablar un debate de barra de bar. Es más, tienen una distinción máxima, la de "Sir", a la que puede acceder cualquiera por medio del mérito y la capacidad. Se la han dado hasta a vulgares futbolistas.
En España tenemos los clubs de alterne en plan Carrefour, donde señoritos y vulgo unen su espíritu y más cosas. Donde las miradas altivas se suavizan y lubrican. Donde los del dinero acogen a la inmigración.
Aquí de las distinciones sociales se encarga el Hola. A nosotros eso de Imperio británico y de honor nos suena a fascista. La mayoría de nuestros nuevos rico-burgueses aparecen por arte de corrrupción, que no es fascista pues empezó con los pelotazos socialistas.
Y tanto los nuevos como los que más o menos viven de las rentas no tienen pose de restirados intelectuales (para eso aquí tenemos a los del cine y la SGAE) son, simplemente, unos maleducados. El escritor ALEJANDRO GÁNDARA habla en su última entrada (http://www.elmundo.es/elmundo/2009/11/18/escorpion/1258538810.html) de inmigración, políticos y demás. Tomo prestado su último párrafo:
"Un día de estos, por ejemplo hoy, habrá que preguntarse por qué en España la autoridad va secularmente asociada a los malos modos, al desplante y a la ignominia. ¿Será porque la plebe lo pedimos? ¿Nos va esa marcha de señoritos en caballos jerezanos democráticamente elegidos? A ver si a la próxima nos enfadamos"
En España ir de caza y de putas puede resultar hasta monárquico. Los malos modos son otra cosa, la altivez suele esconder o ignorancia o incompatencia o mala educación o todas esas cosas juntas.